De Cataluña al resto de España y de España al mundo. Podría ser un lema, o el resumen de nuestro camino como compañía o una filosofía que precede a todo, pero lo cierto es que el sector audiovisual vive este recorrido constantemente, de lo local a lo global. Este proceso se da por dos motivos principales: voluntad o necesidad. Nosotros siempre tuvimos clara la primera opción, y la segunda es un hecho en el sector. Pero por experiencia creo que conviene añadir una tercera opción: la oportunidad.
Vivimos un momento confuso, como suele pasar en esto del audiovisual. Primero las plataformas lo compraban todo, luego nada, ahora la mitad y la otra mitad tenemos que componerla como podamos. La tele sigue haciendo lo mismo y las plataformas quieren ser la tele pero no dejar de ser las plataformas. Antes las plataformas eran una amenaza para la televisión en abierto, ahora lo es la IA para la producción y en breve será el dinero procedente de Oriente Medio, que si ya ha entrado con miles de millones en el mundo del videojuego, no tardará en entrar a lo grande en nuestro sector. Y lo que a río revuelto debería ser ganancia de pescadores no siempre sucede. Pero las oportunidades están ahí.
España es referencia creativa, lo es (y bien lo sabemos por nuestra división de service) como receptor de producciones internacionales, que nos abre un mundo entero de colaboración y de compartir historias, creatividad y esfuerzos. También la IA, que tiene muchas aristas, pero que abre la oportunidad de estudiar cómo mejorar y optimizar procesos manteniendo a la persona, al talento, como pilar principal de cualquier proyecto. Y habrá que ver qué hacen las nuevas economías en el sector, mientras seguimos mirando a Hispanoamérica como nuestro lugar de encuentro natural, porque a lo mejor una cosa con la otra nos convierte en puente. Ese recorrido del que hablaba al principio es un recorrido físico, pero también de apertura. Y ahora, más que nunca, es lo que toca.
